Iffet, finalmente, cumplió su sueño y se casó con Cemil en una íntima ceremonia a la que acuden sus amigos y su hermana Nimet, quien brindó por la felicidad de los novios en La venganza de Iffet. Ahmet, que había rechazado siempre a Cemil, recapacitó y entendió que el taxista es el hombre elegido por su hija para formar una familia. La pareja celebró su noche de bodas haciendo el amor por primera vez.
Cuando parecía que todo empezaba a ir sobre ruedas para los enamorados, Cemil recibió una noticia que le dejó helado: Betül, sin contar con él, se había marchado al extranjero con el pequeño Mehmet. Cemil, por supuesto, interpuso una denuncia contra su ex esposa por secuestro y juro que haría hasta lo imposible por traer a su niño de vuelta a Estambul.
Con el paso de los meses, Iffet esperaba con alegría la llegada al mundo de su primera hija, mientras que Cemil era incapaz de resignarse a la idea de haber perdido a Mehmet par siempre. Por otro lado, Asuman le pidió a Betül que regresasen a Estambul. Resultó que la anciana estaba enferma y quería pasar sus últimos años en su tierra natal.
Betül fue detenida a su regreso a Estambul
Unos días después, el avión aterrizó en el aeropuerto y una patrulla estaba esperando a las dos mujeres para llevarse a Betül detenida. Cemil, por su parte, apareció en comisaría para recoger a Mehmet. «Ahora solo podrás verle cuando yo te lo permita. No voy dejar que vuelvas a separarme de él como ya lo hiciste», le dice Cemil a su ex.
Betül logró salir de prisión e Iffet, sintiendo lástima por ella, le llevó al pequeño a su casa para que pase tiempo con él. Cemil se enteró y amenazó su esposa con divorciarse si volví a hacer algo parecido. No obstante, Iffet respondió con la misma furia y la advirtió que o perdona a Betül y empieza de cero con ella por el bien del niño, o será ella misma quien ponga fin a su matrimonio
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